Por: Lisandra Fariñas Acosta, periódico Granma.
«Construir un imaginario social donde realmente la maternidad y la paternidad tengan la misma jerarquía y tanto el padre como la madre deseen tener sus hijos», es uno de los grandes desafíos que en este tema tiene la sociedad cubana, significó la doctora en Sicología y profesora Patricia Ares Muzio, durante la apertura en el Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex), de la 4ta. Jornada Maternidad y Paternidad: iguales en derechos y responsabilidades.
Sensibilizar a las personas para que el ejercicio de la maternidad y la paternidad se manifieste con amor y placer, pero también desde la responsabilidad y los derechos individuales de cada ser humano es el propósito de las múltiples actividades que desarrollará —desde este 14 de febrero y hasta el próximo 19 de junio del año en curso—, el Cenesex junto a diversas instituciones y organizaciones del país.
«Porque la maternidad y la paternidad es también una responsabilidad de toda la sociedad», destacó el doctor Ramón Rivero Pino, profesor e investigador titular del Cenesex, y jefe del Departamento de Docencia e Investigación Científica de la propia institución, quien agradeció la presencia de Rafael Cuestas, coordinador internacional de programa de la oficina del UNFPA en Cuba, María Machicado, representante de la Unicef en el país, así como la participación del Proyecto Palomas, el Ministerio de Educación, facultades de Ciencias Médicas, el Instituto Cubano de Radio y Televisión, la Federación de Mujeres Cubanas, varios centros de investigaciones y universidades, entre otros.
Será esta jornada, dijo el especialista, un espacio propicio para promover mensajes a las familias cubanas que contribuyan a facilitar el diálogo de niñas y niños con la familia, ser ejemplos para la vida, establecer los límites con firmeza y amor, respetar las diferencias, propiciar la independencia responsable de hijos e hijas, compartir las tareas del hogar entre todas y todos, y solucionar los conflictos sin violencia.
La doctora Patricia Ares destacó los retos de ser madres o padres en la contemporaneidad, donde los papeles y funciones de ambos se han reconfigurado también e interconectado, y a su vez están marcados por los modelos de maternidad y paternidad tradicionales que se han construido a lo largo de la historia.
Ello, además, en un contexto donde la familia también se reconfigura, y ya no es solo mamá y papá desde la función biológica, sino que implica el «maternaje y paternaje, que trasciende más allá de la consanguinidad, hacia una actitud de cariño, amor, entrega, de poder educar a ese niño o niña», explicó la experta.
Asimismo, mencionó que la maternidad y paternidad en Cuba tienen numerosos desafíos, que van desde el lograr conciliar las funciones de ser madre con otras realizaciones sociales y la vida laboral; el reto de la educación en una sociedad tecnológica, donde lo que decimos a nuestros hijos e hijas ya no basta, y hay que aprender a dialogar con esas nuevas tecnologías, pues a veces interactúan más tiempo con estas que con los mensajes de la familia; hasta una parentalidad que se extiende ante la separación de los padres y donde la distancia no puede significar distanciamiento y pérdida de las funciones.
En ese sentido, la doctora señaló la importancia de rescatar la paternidad en la sociedad cubana, muchas veces menos valorada ante la figura de la madre. «Somos una sociedad de maternaje y paternaje múltiple», dijo. Que sea entonces esta nueva jornada un espacio de reflexión, análisis y debate provechoso para que ser madres y padres sea un derecho y también una responsabilidad compartida conscientemente.
